La viveza criolla y las cucarachas se parecen, y así comparten estilos de vida y tácticas de supervivencia.
A similar remedio similar enfermedad, dicta la lógica; en consecuencia los métodos para mantener a raya estas dos plagas se parecen (en letra cursiva se destacan los correspondientes a la viveza)
1. A las cucarachas les gusta la oscuridad y el silencio; entonces ilumine, deje entrar el aire y la luz del sol, haga ruido. Viveza criolla: denuncie, publique, expóngala, ridiculícela.
2. Búsquelas en sumideros y cámaras sépticas. Visite organismos y reparticiones abandonados o alejados de la luz del poder central.
3. Les gustan los ambientes caóticos y abandonados; ordene. Simplifique las normas, renueve, elimine la burocracia y los intermediarios.
4. A diferencia de las hormigas que gustan de trabajar y son grandes constructoras, la viveza criolla y las cucarachas se parecen en que no son esforzadas trabajadoras y sólo saben destruir y ensuciar.
5. Las más difíciles de erradicar son las cucarachas pequeñas; aparentemente inofensivas, pero las más numerosas. Combátalas hoy porque muy pronto se volverán grandes, y dejarán sus hijos.
6. Ambas son individualemente son débiles. Al igual que las ratas y las manadas de la sabana, su fuerza está en el grupo; desúnalos y atemorícelos. Pero cuando con rigor elimine unos cuantos, el resto se irán solos. Establezca controles cruzados y alternancia en los cargos.
7. Tenga mucha paciencia; ni estos bichos ni la viveza criolla se erradican de un día para el otro. En cuanto nos descuidamos vuelve a aparecer en cualquier rincón. Sea entonces persistente en los controles periódicos.
8. Están en la casa del rico y también en la del pobre. Si bien a diferentes escalas (cuello blanco o ladrón de gallinas), sabemos muy bien que en todas partes construyen sus nidos.
9. Ambas gustan de los climas cálidos. No abundan en Suecia, Finlandia o Canadá; en esos entornos asépticos y transparentes, sólo se sobrevive mediante el esfuerzo honesto y la competencia limpia.
10. Se vuelven inmunes a los insecticidas (viveza criolla: policía, inspectores) No los use con demasiada frecuencia y cámbielos periódicamente.
11. No se confíe. Ambas están más cerca de lo que Ud. imagina, no sólo en los armarios y grupos sociales del vecino.
12. No las subestime. Cuando Ud. duerme, en la oscuridad y sin prisa pero sin pausa, están royendo los cimientos de su casa (y de su país…)
Con autorización del autor, del blog http://malditavivezacriolla.wordpress.com/
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