viernes, 5 de marzo de 2010

La mujer - Samanta Ortega Ramos

La mujer con la que me casé apareció este fin de semana (el sábado para ser más preciso) después de mucho tiempo de ausencia. Llevaba tacones, un vestido negro ceñido a la cintura, el pelo a lo Greta Garbo, el perfume que me vuelve loco y unos ojos grandes y llenos de pestañas (¿o cejas?, es que siempre las confundo). La boca sobresaliente en rojo esmaltado.
Como había recibido un pequeño aumento de sueldo, la llevé al mejor restaurante y después a bailar, para festejar su aparición y mi progreso. La pasamos muy bien, recordamos viejos tiempos y nos besamos como dos chiquillos.
Al llegar a la casa se me contrajo el estómago. Por eso le rogué al oído por última vez “no me vuelvas a dejar nunca”. Ella se metió en el baño en suite diciendo “no seas tontito”. Y me quedé mirando la puerta, sentado en el borde de la cama, como un perro esperando a su dueño fuera de la tienda.
Al rato, otra mujer, la de todos los días, la de las ojeras y los pelos desteñidos, se acostaba otra vez en mi cama con mismo pijama raído.


Sobre la autora: Samanta Ortega Ramos

No hay comentarios.: