jueves, 10 de octubre de 2013

Péinate y anda - Anahí González


Cuando la tarde gris, fría y con amenaza de lluvia, no se ajusta a las expectativas que tenías sobre ella, hay que inventar.
Así que tras calzarme los patines eché a andar.
La pista circular al aire libre no estaba lo que se dice concurrida. Solo un Sr. Ciclista formaba parte de mi coreografía improvisada.
Al principio fue como siempre: impedida de atender otro asunto que no fuera mi cuerpo y su precario equilibrio, intenté controlar los furcios.
Delante y en curvas, el gris. Arriba, verde y mojado. Había empezado a lloviznar.
Pie va, brazos vienen, minutos más tarde era Natalie Portman en el Cisne Negro –claro que, objetivamente, mis movimientos eran más similares a los de un bailarín sin muchos reflejos ensayando los pasos de alguna rara danza nueva.
Así las cosas me complacía imaginar que el Sr. Ciclista, con su casco y sus calzas, disfrutaba tanto como yo del paisaje, de su respiración y que hasta, tal vez, repetía para sí alguna canción mientras le ganaba interiorimente una pulseada a la llovizna.
Pero mi sueño de armonía se derrumbó al mismo tiempo que mi anatomía rebotaba varias veces contra el cemento antes de quedar en una posición final digna del kamasutra.
El Sr. Ciclista pasó tan rápido por el bulto amorfo que significaba mi cuerpo que no alcanzó a frenar –por un momento pensé que había obrado aconsejado por la sabia vergüenza ajena.
El intento por reincorporarme fue menos decoroso que torpe pero no hubo testigos oculares.
Una vez con los sentidos en su lugar me pasé la mano por el pelo suelto que a esta altura era una especie nido, me sacudí un poco y eché a andar como si nada.
Así estaba, remando para volver a lo de Natalie Portman cuando escuché a mi espalda una voz que debía ser la del Sr Cicilista –y efectivamente lo era.
—Veo que estás bien. ¡Sos dura! –dijo, y pasó como un rayo.
Si supieras cuántas veces me caí, Sr. Ciclista.
Pero siempre me piené, me acomodé un poco y como fuera, volví a la pista.
En ese orden.

Tomado de Espejitos de colores
Sobre la autora:  Anahí González

No hay comentarios.: