Miro el cuerpo del padre. El cuerpo está desnudo. Mis hermanos están en derredor del cuerpo del padre. El cuerpo está desnudo. Está desnudo y está muerto. Hay una lanza en el costado del cuerpo del padre. Con esa lanza matábamos cerdos salvajes. Ahora la lanza atraviesa el desnudo cuerpo del padre, que está muerto.
Yo arrojé la lanza. Yo maté al padre que está desnudo. O tal vez fue mi hermano mayor. O tal vez fue mi hermano menor. O tal vez fuimos todos.
Ahora el padre será nuestro. Su carne se va a quemar entre las brasas y será nuestro. Yo voy a comer al padre y las mujeres del padre serán mías. Yo voy a comer al padre y la comida del padre será mía. Mis hermanos van a comer al padre y todos seremos el padre. Pero tendré que alejarme. Yo estoy maldito porque maté al padre. Y mi hermano mayor también tendrá que alejarse. Y mi hermano menor también tendrá que alejarse.
Ahora me alejo. Algunas mujeres me siguen. Y algo más que no alcanzo a entender. Es un fuego que me consume. Es terror y es deseo de castigo.
Las mujeres me siguen en silencio. Es la tarde. A lo lejos pasta el búfalo.
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