martes, 4 de septiembre de 2012
Máscaras y contra máscaras – Ana Caliyuri
Yo era una niña. Recuerdo que caminé de principio a fin de la calle, una y otra vez, infinitas veces, llorosa, triste, apenada. Deseaba hallarlos. No encontré el Sur, no supe de brújulas, aunque dicen que marca el Norte. Ya extenuada, me veo sentada en el umbral de la puerta de calle esperando que la correntada me devolviese mis barquitos de papel plateado. Nunca volvieron a mi. Con el transcurso del tiempo, comprendí que yo no podía aceptar que el agua de lluvia que corría por el cordón de la calle, estrujase mis pequeños barcos para devolverlos sucios y con barro. Le conté la anécdota a un viejo compañero de barcos de papel, no hace mucho. Ya ambos somos vetustos. Sonriente me respondió.
—Es hora de que lo sepas. Cada vez que tus barcos doblaban en dirección a donde estaban los míos yo los cambiaba por los propios que siempre estaban embarrados. No podía soportar ver los tuyos tan brillantes.
Lo miré tristemente y agregó.
—Pero nunca los he olvidado, aún los guardo en una vieja caja. Pensé que algún día lo sabrías y vendrías a buscarlos…
Acerca de la autora:
Ana Caliyuri
Publicado por
Javier López
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