domingo, 28 de noviembre de 2010

I - La llamada - Samanta Ortega Ramos


Un año atrás decidí hacer el llamado. No había estado frente a una situación tan mística desde mi última carta a los Reyes Magos. Llamar a la Cigüeña significaba, entre otras cosas, cortar de cuajo una adolescencia extendida desmedidamente.
Para ello, tuve que conseguir el Co.Ci. (Código Cigüeña), único e intransferible, que me habilitaría a realizar la petición y que no podría utilizar más de una vez.
Marqué el número y atendió una voz monocorde que lo solicitó inmediatamente. A continuación hizo algunas preguntas básicas como: edad, estado civil, método de anticoncepción hasta la fecha y poco más. Cuando terminó con el cuestionario, la voz enlatada me ordenó que dejara de tomar la píldora y empezara con el ácido fólico yodado. Después se despidió con un “fin de la llamada en curso, gracias y hasta la próxima”.
Indignada, marqué el número de atención al futuro padre, costándome, por lo menos, dos horas de darle a la tecla R.
Como la señorita que me atendió era de carne y hueso, aproveché: "Por favor, sea amable en decirme cuándo llegará mi bebé y si la Cigüeña lo traerá en persona. También necesito saber el sexo y si es posible, alguna información sobre su ADN".
La señorita, muy desinteresada, me respondió, mientras masticaba chicle, que no tenía la menor idea y me aconsejó, después de explotar un globo en mi oído, que me lo tomara con calma. "¿Y cómo hago eso?" "Pues, olvidándose." "¿Olvidándome?, pero ¿cómo voy a olvidarme si justo ahora me pongo a pensarlo?" "Peor para usted, señora (¿señora?), porque cuanto más pendiente esté más largo se le hará. Ah, y otra cosa que no sé si se lo habrán dicho: espere un mes antes de empezar con los rituales."
Como me quejé de los servicios recibidos, la muy desfachatada insinuó que, si no estaba contenta, podía cancelar la petición y escribir a París para encargarlo, "pero yo no se lo recomiendo, están de huelga".


Tomado del blog:http://unaembarazada.blogspot.com/

Sobre la autora: Samanta Ortega Ramos

1 comentario:

J. G. dijo...

excelente, me gustó a pesar del azar al caer aquí

saludos